Arte infantil
El artista es un receptáculo para las emociones que vienen de todas partes: del cielo, de la tierra, de un trozo de papel, de una forma que pasa, de una tela de araña.
Pablo Picasso.
El arte en todas sus manifestaciones constituye una característica esencial que identifica al ser humano, ha permitido transmitir la cultura en toda su extensión y ha sido y es básico para su supervivencia. Nuestro cerebro plástico necesita el arte. Ya en los primeros años y de forma natural el niño juega, canta, baila, dibuja y todas estas actividades son imprescindibles para su correcto desarrollo sensorial, motor, cognitivo, emocional y en definitiva cerebral, que le van a permitir aprender a aprender. Y realizando todas estas actividades el niño se divierte, muestra orgulloso sus resultados a los demás, intenta mejorar y ésta es una forma efectiva de entrenar una de las grandes virtudes del ser humano: el autocontrol.
BENEFICIOS:
· Los grupos de aprendizaje cooperativo convierten las clases en comunidades de aprendizaje.
· Simplemente son ellos mismos.
· Desarrollan su creatividad y su imaginación.
· Mejoran su autoestima. Los pequeños, cuya autoestima desarrollan durante sus primeros siete años de vida, se sienten realizados cuando crean arte y ven el resultado de su obra (y lo enseñan a los adultos).
· Desarrollan su motricidad y su coordinación mano-ojo.
· Al bailar fortalecen sus músculos largos del cuerpo.
· Concentración. Durante los momentos en los que están o bien creando o bien contemplando obras de arte, los niños están alimentando su capacidad de concentración.
· Diversión. Los niños disfrutan y se divierten enormemente dibujando y creando su propio arte, ofreciendo al mundo su visión. Cuando visitan museos, reciben un bagaje artístico que les ayudará a conformar su mirada intelectual a largo plazo.
· El arte les ayuda a los niños a incrementar su vocabulario con palabras para los colores y las sombras. Pero también les permite desarrollar la capacidad de expresar pensamientos e ideas más abstractos
· El arte ayuda a desarrollar una mayor empatía y un mejor manejo e interpretación de los sentimientos
No se puede negar que las actividades artísticas están arraigadas en el propio desarrollo del ser humano desde su nacimiento y que constituyen una recompensa cerebral natural necesaria para el aprendizaje. Porque la práctica de cualquiera de las manifestaciones artísticas lleva asociada un componente emocional que nos motiva y que nos permite contemplar el mundo que nos rodea desde una perspectiva diferente, más estética, más profunda. La Educación Artística resulta imprescindible porque permite a los alumnos adquirir toda una serie de competencias socioemocionales básicas para su desarrollo personal y que, además, les hace más felices. Y ese es el verdadero aprendizaje, el que les prepara para la vida. El cerebro humano, que es un órgano complejo en continua reestructuración, agradece los retos y necesita el arte.
«En aprender a pintar como los pintores del renacimiento tardé unos años; pintar como los niños me llevó toda la vida.»
Pablo Picasso
Fuentes:
¿Por qué el cerebro humano necesita el arte?