Actividades para favorecer el lenguaje (12 a 18 meses)
Desde los primeros años de vida la comunicación es fundamental para los seres humanos ya que es el modo en que comunicamos lo que necesitamos, lo que queremos, intercambiamos ideas, convivimos, etc.… en los primeros años el ser humano usa el llanto y las expresiones faciales para llamar la atención, después utiliza gestos y el cuerpo para manifestarse, como mover la mano para decir adiós, colocar el dedo sobre los labios para indicar silencio o aplaudir cuando algo se hizo bien; de esta manera comienzan a expresar sus necesidades básicas. Después comienza a balbucear y de esta manera comienza a comunicar, posteriormente comienza a juntar silabas, formando palabras, después esas palabras las junta y forma oraciones de 2 palabras, después de 3 palabras hasta que el vocabulario se amplia y las oraciones se vuelven más complejas.
Ya que sabemos cómo se desarrolla el lenguaje, es importante saber que este no se da por sí solo, que al igual que las demás áreas hay que estimularlo para favorecerlo ya que; la estimulación del lenguaje permite desarrollar el pensamiento, aumentando la capacidad intelectual y de análisis, contribuyendo así al desarrollo cognitivo y a una adecuada expresión de ideas, sentimientos y emociones.
Por años se han creado mitos como: el niño hablara cuando esté listo, el niño aprenderá solo al escuchar hablar a los demás, esta pequeño no hay prisa porque hable, no hace falta estimularlo, etc.
Y si, sabemos que algunos de estos argumentos están establecidos respetando los tiempos del pequeño y su ritmo, pero es importante ir de la mano de los dos puntos, es decir; estimularlo y al mismo tiempo respetar el ritmo de los pequeños.
Y te preguntaras, ¿Qué beneficio tiene estimular a mi pequeño a partir de los 12 meses?
Es cierto que a esta edad no esperamos que todo lo comuniquen de manera verbal, pero si ya se comienza a esperar palabras, aunque no estén completas, además es importante comenzar desde pequeños porque, aunque les enseñemos una palabra que probablemente no dirá en ese momento su memoria la guarda y más adelante en el momento en el que tenga que comenzar a comunicarse con más palabras no le será difícil decirlas. Y de esta manera iremos estimulando el lenguaje ya que si bien recordamos, a partir de la pandemia y del encierro mundial que tuvimos, nos fue imposible interactuar con más personas lo cual provoco un retraso en el lenguaje de manera nacional porque como es bien sabido el lenguaje también se aprende relacionándose con las demás personas en diferentes tipos de entornos, aunado a esto los cuidadores trabajaban desde casa horarios completos que no les permitía convivir con los niños ni estimularlos. Es hora de darnos cuenta de la importancia que tiene el lenguaje y no dejarlo en algún día hablara. Recuerda que estamos en la gran ventana de oportunidad para favorecer el desarrollo de tu hijo y que esto influya en su vida adulta.
Comienza a trabajar en el lenguaje desde los primeros meses de vida. Aquí te dejamos algunas estrategias para que comiences a trabajar el lenguaje:
° Invita al niño a tocar un instrumento musical
° Pon música de fondo y pídele que se mueva al ritmo de la música.
° Cántale la canción de pin-pon y realicen juntos los movimientos y gestos que se vayan mencionando.
° Jueguen a escuchar los diferentes sonidos del entorno y pregúntale de que son.
° Pídele repetir sonidos que escuche en la casa o en la calle como el tren, las aves, etc.
° Muéstrale objetos diferentes y di su nombre completo como: leche, agua, pan y pídele que los repita.
° Ayúdale a completar palabras como, esta es una pelo…ta.
° Cuando intente decir una palabra repítasela correctamente.
° Dile palabras sencillas. (mama, papa, agua, etc.) despacio y de frente para que vea tus labios e intente imitarte.
° Enriquece su vocabulario mencionando los objetos mencionando los objetos a su alrededor, no uses diminutivos.
° Antes de darle el objeto, pide que lo señale y hazle preguntas como: ¿Cuál quieres, este o aquel?
° Pon atención a las palabras nuevas que va aprendiendo y repíteselas en diferentes contextos o espacios.
° Escuchen canciones para ubicar las partes del cuerpo y pídele que las señale como: esta es tu cabeza, ¿Dónde está tu cabeza?
° Pregúntale sobre la ubicación de algunos objetos, como: ¿Dónde está la pelota?, ¿Dónde está el carrito?, ¿Dónde está la muñeca?